Desde el primer momento que vi el trailer japonés de Muramasa: The Demon Blade, quedé fascinado. El arte, el estilo, el modo del juego. Era un respiro de aire fresco después de tanto “shovelware” que sale en el Wii.
Una vez que tuve la oportunidad de jugarlo… DAMN! Pero que buen juego.
Muramasa cuenta con dos personajes distintos que comparten los mismo movimientos mas no la misma historia:
Momohime es una bella dama cuyo cuerpo es poseído por el espíritu de un espadachín sumamente habilidoso, el cual la usa para cumplir con su misión.
Por otra parte, Kisuke es un ninja que perdió la memoria y que es perseguido por otros miembros de su propio clan.
Los controles de Muramasa son excelentes y súper sencillos. Tienes un botón para atacar, otro para usar poderes y uno para cambiar de espadas. Combinaciones con el control modifica la forma con la que atacas. Y es todo.
Pero en donde más destaca Muramasa en la sección artística: es una orgía de musica y arte. Y no una orgía cualquiera, de esas donde a uno le toca echarse a la mas fea, si no a una con mucha categoría y actores porno reconocidos.
Muy bien, admito que no es la mejor analogía del mundo, pero realmente el soundtrack y la dirección de arte son muy buenos. Las animaciones, los fondos y efectos tienen mucho detalle y son espectaculares. El soundtrack también es del género que lo conozco como “música japonesa antigua” con un poquito de Metal en algunas ocaciones.
En definitiva, Muramasa: The Demon Blade es arte.
Tal vez el único defecto que le encuentro es que tienes que hacer mucho “backtracking” o mejor dicho ir de un lado a otro por locaciones que ya visitaste, pero ese problema luego se convierte en algo conveniente. De esa forma, puedes pelear mas, subir de nivel y sobre todo admirar los lindos paisajes y disfrutar de un excelente soundtrack.
Luego me lo prestas :D
ResponderEliminarClaro que si
ResponderEliminarSe ve curada el juego, muy old fashion y control sencillo a como lo planteas. La tematica tambien se ve atractiva.
ResponderEliminarSi tuviera Wii, definitivamente le daria una oportunidad al juego.